Alrededor del mundo, diferentes culturas han desarrollado relatos acompañados de criaturas, dioses y animales fantásticos, las culturas prehispánicas no son la excepción. Estas antiguas civilizaciones dejaron un vasto legado que enriquece el gran folclore de nuestro país. En este artículo, hablaremos de un animal fantástico tan maravilloso y mágico, que es capaz de batallar y sobrepasar a otras criaturas de distintas partes del mundo, como los pegasos o unicornios.

¿Qué es el Zip Keej, el animal fantástico de México?

El Zip Keej es un animal fantástico perteneciente a la mitología maya. Según los relatos, esta criatura es conocida como “El rey de los venados”. Su aspecto es similar a estos, pero de un tamaño y belleza superiores. Tiene ojos de jade, piel aterciopelada y astas más desarrolladas y de color negro. Sobre sus cuernos lleva un panal de abejas de fuego que produce una miel mágica, capaz de curar cualquier enfermedad física, espiritual y mental, y además otorgar la inmortalidad. Los mitos cuentan que la miel de sus abejas solo la entregaría a personas de corazón puro.

Se dice que este ser tiene la capacidad de controlar los vientos, convertirse en niebla y que sus pisadas dejaban flores blancas. Era considerado como el guardián del equilibrio de la naturaleza, de los bosques y de la fauna. Principalmente, resguardaba a los venados de los cazadores, por lo que los mayas realizaban rituales para solicitar su permiso para cazar.

Los Zip Keej representan la conexión espiritual entre los humanos y la naturaleza. Son un símbolo de la armonía y el respeto que deben existir entre las personas y el mundo natural. Los rituales relacionados con los Zip Keej incluían ofrendas y plegarias para agradecer por la abundancia de recursos y pedir su bendición y protección. En la actualidad, diversas comunidades mayas aún guardan un gran respeto hacia ellos.

Las antiguas leyendas dicen que nadie se atrevía a tocar al Zip Keej, y si un cazador tenía la osadía de dispararle, moría al instante o era ferozmente atacado por el gran enjambre de abejas que lo acompañaban. Se cuenta que este animal fantástico suele burlarse de los cazadores, haciendo que pierdan el rumbo o que persigan lo que parecen ser venados, pero que a la postre resultan simples iguanas. Los cazadores solo se podían liberar de este engaño con un amuleto llamado Yut (también conocido como tunich-ceh), una pequeña piedra que a veces se encuentra en el estómago de los venados.

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